Puede resultarnos asombroso o realmente de mal gusto el hecho de que una multa llegue a una persona que ha fallecido. La historia se convierte en más irreal cuando la persona en cuestión fallecida lo hizo hace más de 20 años y ahora es justo el momento en el que le llega la multa de tráfico.

Esto que puede parecernos inventado, sin embargo es del todo real y tiene unos claros protagonistas: la familia de Manuel José Lara Callejas que han visto perplejos como les ha llegado recientemente a casa una multa por exceso de velocidad del conductor que falleció a causa de un accidente laboral, hecho que al parecer, pasó por alto en Tráfico.

Sin embargo este error al parecer no recae en la Dirección General de Tráfico y tiene su origen -igual de irreal- en una empresa de alquiler de vehículos que transcribió mal el DNI de un cliente e hizo con esta acción responsable de la infracción al fallecido Manuel José Lara Callejas. Un episodio a todas luces desagradable que parece de primeras una cruel broma macabra.