La polémica en Cataluña está bien servida entre el Servicio Catalán de Tráfico y la propia Dirección General de Tráfico (DGT). Frente a la insistencia y las exigencias que se habían puesto al frente para lograr que no hubiese coches circulando sin la ITV, ahora desde Trànsit ponen de manifiesto que la DGT cuenta con errores en sus bases de datos que invalidarían todo el procedimiento.
Unas declaraciones por parte del director del Servicio Catalán de Tráfico (SCT) han sido el detonante para crear un debate que ahora es parte de todas las tertulias y comentarios en Cataluña. El rigor con el que se estaba penalizando hasta el momento a los vehículos captados con los radares en las carreteras, para comprobar si tenían la ITV pasada, se ha visto interrumpido por imprecisiones en la base de datos de la DGT.
De esta forma, Joan Josep Isern, director de Trànsit, manifestaba contundente que por parte de ellos se dejarían pasar las multas de tráfico a los vehículos sin ITV, argumentando su decisión en los errores descubiertos en la base de datos de DGT. «Este registro de vehículos de la DGT nos está dando un margen de error y de imprecisiones que comporta un perjuicio para los conductores y hoy tomamos la decisión de no contemplarlo para seguir multando a vehículos», ha anunciado en su aparición tras la polémica.
Entonando un ‘mea culpa’ confirmaba que en todo este tiempo han impuesto unas 400 denuncias a conductores que supuestamente no tenían la ITV en regla como se constataba en la Dirección General de Tráfico, para posteriormente descubrir que eran informaciones erróneas y muchos de esos vehículos tenían en vigor la famosa inspección técnica. Para los afectados han habilitado unos números de teléfonos a fin de resolver de la mejor forma y sin necesidad de desplazamientos los problemas ocasionados. Los presentamos a continuación: 93.551.11.32/ 93.556.65.69/ 93.567.40.89 y 93.567.40.09 respectivamente.
Estas acusaciones no iban a quedar en saco roto y frente a lo que se afirma desde el Servicio Catalán de Tráfico, DGT ha lanzado una férrea defensa indicando que Trànsit ha utilizado su base de datos de septiembre «como si después no hubiese habido modificaciones», de ahí que se hayan producido denuncias erróneas a conductores con la ITV. Mantienen que su registro es «vivo, en continua evolución y en continua captación de datos».
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