‘Si se bebe no se conduce’. Ésa es la máxima que todo conductor debe tener siempre presente. Un sentido de la responsabilidad que en ocasiones se puede tambalear por una cena inesperada y alguna que otra cerveza de más. Para terminar con las dudas y saber si hemos hecho aunque sea un exceso mínimo de alcohol que será captado en la pertinente prueba, están cada vez más cerca los alcoholímetros en el móvil.
Se trata de una iniciativa de Kickstarter que basa su tecnología en un accesorio para micro USB que, basicamente convierte un dispositivo Android en un alcoholímetro. Esta novedad bautizada como Drinkmate está bastante avanzada y podría a falta de una inversión traducida en 40.000 euros, ver pronto la luz dado que ya se han elaborado pruebas con distintos modelos de móvil Android, obteniendo unos gratos resultados.
Básicamente se trata de un pequeño dispositivo con tamaño y funcionalidad similar a un USB que se conecta a nuestro dispositivo móvil y a través del cual soplamos. En cuestión de segundos se nos dirá el contenido de alcohol en sangre estimado, con un error máximo de dos centésimas de punto porcentual. El tope del sensor se encuentra en 0,20 % de contenido en sangre, donde ya el aviso no requiere más precisión porque la norma y cordura nos dictan que ya no tenemos que conducir.
El móvil se convierte en conciencia
Su integración será primero en EEUU y posteriormente en función de su aceptación traspasará al resto de fronteras. La idea es concienciar a los conductores de que igual algunas situaciones se les escapan de su control, aunque ellos estén empeñados de lo contrario. Ahora el mismo móvil se convertirá en conciencia para estas situaciones.
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