La difícil situación económica en la que nos encontramos nos muestra noticias a diario de incremento de multas, presiones a agentes, así como sanciones irregulares, con el fin de que el dinero se haga efectivo de alguna manera. A este carro de conseguir finanzas extra para tapar agujeros, se ha unido el Ayuntamiento de Laredo en Cantabria que ha adjudicado de cara al futuro, para el cobro de multas de tráfico a una empresa privada, sustituyendo la antigua labor que hacía Tráfico.

El nuevo convenio implica que una empresa privada sería la que llevase las cuentas de las multas de tráfico que se cometan en el municipìo, encargándose de las zonas de estacionamiento limitado entre otros puntos. De esta forma si se llega a un acuerdo el Ayuntamiento ingresaría un porcentaje de lo recaudado para revertir en el municipio, dado que actualmente no ingresa en sus arcas.

Las funciones en este municipio cántabro del cobro de multas recaían en un acuerdo suscrito por la Jefatura Provincial de Tráfico que hasta que no se haga efectivo este cambio, continúan a día de hoy con esta tarea. Por lo que se ha dado ahora un giro inesperado para combatir a base de las multas de tráfico del ciudadano, los escasos recursos económicos con los que cuentan los Ayuntamientos de la mayor parte de los municipios españoles.