Los radares en el suelo, trampa de Tráfico para los conductores

Desde que aparecieron en la carretera de Andalucía han sembrado dudas y temores entre los conductores. Unas marcas sospechosas con forma de cuadrados que sobre ellas siempre en todo momento planea la duda de resultar una nueva forma de radares de velocidad. La respuesta a esto por parte de Tráfico es una negativa, aunque existen aspectos que no cuadran en esa justificación.

Podría tratarse de un nuevo sistema de radar, capaz de registrar la velocidad de los vehículos a su paso, que se encuentra esta vez situado en el suelo. Difícil de detectar y más aún de precisar. Ante esta sospecha Tráfico ofrece una explicación que sin embargo no logra convencer al haber determinados signos que resultan incoherentes en el discurso.

Afirman que este dispositivo no es ningún tipo de radar, sino que es una estación de toma de datos que trabaja para registrar el número de vehículos que circulan cada hora, por cada carril de una vía diferenciando los tipos de vehículos -ligeros, pesados-, y principalmente pensado para calcular la densidad del tráfico en fechas señaladas. Una explicación que podría ser suficiente pero que en concreto en la A-4 va más allá de estos datos.

Radar oculto para multar

Siento más detallistas, a la altura del Cerro de los Ángeles, podemos encontrar este ejemplo de marcas del suelo, posibles radares. Un tramo que además de presentar los misteriosos cuadrados en el pavimento esconde tras uno de sus paneles informativos una cámara dedicada a controlar la velocidad. De esta forma pendientes de las marcas de la vía no reparamos en que hay otro elemento en la composición dispuesto a multar.

Un dispositivo que limita la velocidad a 100 y que utilizando la técnica del camuflaje lleva  a confusión a los conductores creyendo que procede tal sanción de las marcas viales y es fruto de la labor minuciosa de ocultación.