La idea de no acudir a la autoescuela para lograr el carnet de conducir nos podía parecer descabellada hace unos años, sin embargo las tecnologías y el hecho de economizar por todos los medios para hacer frente a la crisis, está universalizando una práctica que puede asentar y generar una peor formación de los futuros conductores.
Desde que la Dirección General de Tráfico (DGT) diera luz verde a las denominadas escuelas online, destinadas a preparar el teórico, muchas voces se han alzado críticas en torno a este aspecto. Una polémica en donde las autoescuelas se unen para mostrar su total desacuerdo dado que tal como definen desde la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE), empeorará aún más la formación y la seguridad en un futuro de los conductores.
«No se trata de aprender solo las señales de tráfico, sino también actitudes al volante, ciertos valores de convivencia, control de las emociones» que aseguran desde Pons Seguridad Vial, son realmente indispensables para sentarse a conducir en un vehículo. Sin existir esta concesión de Tráfico,tal como nos encontramos en la actualidad ya sólo un 5% de los alumnos acuden a las clases teóricas para preparar el examen, lo que con este permiso vaciaría en su totalidad las aulas.
Aumentan los suspensos
Una concesión por parte de la DGT que no se llega a entender, si puede perjudicar en definitiva la seguridad vial, además de ofrecer una formación más escasa para los futuros conductores. En cifras según Pons Seguridad Vial, se ha incrementado en un 20% el número de los suspensos del carnet de conducir, alejándonos del modelo y resultados que se exige en países europeos.
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