El gozo de muchos en un pozo. Mientras el sector de la automoción y una gran parte de la sociedad esperaba un nuevo nombre como director de Tráfico (ya sea porque lo deseaba con ganas o porque ha apreciado el trabajo de Pere Navarro), Rajoy ha aparecido para decir que dejen de esperar.

En una entrevista concedida a Efe, la primera que ha dado como presidente del Gobierno (y casi sus primeras declaraciones y aparición desde que accediera al cargo), ha despejado alguna que otra duda sobre lo que su equipo pretende hacer en los próximos meses.

El tema de Tráfico no ha podido faltar. El periodista le preguntaba directamente y sin rodeos que si pensaba en cambiar al director general de Tráfico, Pere Navarro, que accedió al cargo cuando arrancó el Gobierno de Zapatero allá por 2004. Ésta ha sido la respuesta, literalmente:

«Para serle franco, no está entre mis prioridades cambiar al director general de Tráfico, que ni siquiera me lo he planteado. Los equipos al final los tienen que hacer los ministros y los traen al Consejo de Ministros y, por tanto, será el ministro del Interior quien tenga que tomar esa decisión. Pero es verdad lo que usted ha dicho: los accidentes han disminuido mucho en los últimos años y el director general de Tráfico no ha hecho una mala labor, como todo el mundo reconoce, y yo también.

Pero, en fin, esto es algo que corresponderá al ministro del Interior. De momento ahí está, y no ha sido una persona que, efectivamente, haya hecho una mala gestión.»

Con estas declaraciones, además de quedar retrasada indefinidamente la sustitución de Navarro, el actual director de Tráfico, que tantas críticas se ha llevado a lo largo de sus años en el cargo, se ‘embolsa’ también unos cuantos halagos de parte del nuevo presidente del Gobierno.