Desde que hace exactamente tres meses se pusieran en marcha los nuevos radares de tramo en nuestro país, muchos conductores ya han recibido una multa por no haber respetado la velocidad máxima en los tramos controlados. Concretamente, el radar de tramo de Galicia, situado en el túnel de O Sartego, ha puesto 1.988 multas en este trimestre, lo que son unas 22 al día aproximadamente (de 865.226 conductores controlados).
La mayoría de los ‘cazados’ circulaba a una velocidad situada entre los 120 y los 130 km/h en un tramo limitado a 90. El jefe de Tráfico en la provincia asegura que los resultados son buenos: «ha creado conciencia, se circula a velocidades razonables, ya no sólo en el túnel controlado por este radar, sino en el resto de subterráneos».
Ante semejantes resultados, la idea es seguir colocando radares de tramo en un futuro inmediato. En la comunidad gallega hay propuestas para situarlos en la autopista de A Coruña – Carballo (AG-55), AP-9 y la autovía de O Barbanza.