Cuando parecía que no nos quedaba nada por ver, el Ministerio de Fomento ha instalado un badén en plena M-40. No sólo es extraño, sino que también puede ser peligroso.
El badén, instalado hace unos días por el Ministerio de Fomento, está instalado en el kilómetro 51, sentido ascendente. En una autovía de tres carriles, dirección A-1.
Desde su instalación, el badén ha provocado multitud de atascos, puesto que es una de las vías más tristes de la capital. Además, ha provocado las protestas ciudadanas, que se quejan tanto por cuestión de atascos como por su seguridad, además de velando por sus vehículos: los bajos de muchos coches pueden verse también afectados.
Pero, como decíamos, no se trata sólo de que resulte incómodo. El badén supone que los conductores tengan que pasar por encima a una velocidad de 40 o 50 km/hora, reduciendo la marcha de una vía limitada a 100. Eso origina frenazos y, en ocasiones, puede ser motivo de accidente.
Un badén preventivo
El obstáculo ha sido instalado por el Ministerio de Fomento, en un intento de proteger la junta de dilatación del puente, actualmente en reparación. Si bien es cierto que previamente hay señales de aviso de obras, las señales especiales de velocidad pasan de 80 a 60 km/hr en un breve tramo, por lo que es fácil que algún vehículo llegue al punto en cuestión a una velocidad superior a la permitida. Además, el badén no cubre los tres carriles, sino que deja al aire la junta del dilatación del carril situado a la izquierda.
Ya hay una petición en Change.org para solicitar la retirada del badén de la M-40, motivado por la preservación de la integridad de los viajeros que pasen por la vía.
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