Si algo bueno tiene que existan unas elecciones cercanas, es que llega el momento de las promesas y toca mimar al electorado después de los palos y gastos que se han llevado repetidamente a cabo. Es por ello que Parla, conocedora de su situación y de la sangría de sanciones con la que se ha maltratado a los conductores, dedice ahora a tres meses del cambio, anular los radares que en este tiempo tanto han recaudado.
Con una media de 225 multas de tráfico al día y en los peores casos de más de 400, el caso del municipio madrileño de Parla es de los que resulta prácticamente imposible que pase desapercibido. Un culebrón en donde hay alcalde, empresa privada encargada de la gestión del tráfico -Bilbomática S.A- y unos sufridos conductores que han visto como se vaciaban sus bolsillos en favor de esta empresa que cobraba el 80% de lo recaudado.
Sin embargo un nuevo episodio en este culebrón ha dado un giro inesperado a una situación que resultaba verdaderamente asfixiante para los conductores. La sospecha de la cercana presencia de las elecciones ha sido la que ha obrado el verdadero milagro y por decisión del Pleno Municipal, con el fin de no tener que hacer las maletas en unos meses, se ha suspendido temporalmente el contrato con la empresa privada encargada del control y recaudación de los temidos radares.
Las elecciones destapan el verdadero fin de los radares
Se trata de una medida disuasoria ante el brutal aumento de las multas de tráfico en los últimos tiempos. Pero llegados a este punto nos preguntamos si ese Plan de Seguridad, resulta ahora menos seguro o es que realmente nunca se ha velado por la seguridad del ciudadano y se ha sobrepasado con mucho los límites.
La rectificación tanto del grupo socialista como del Gobierno Municipal en un momento bastante crítico en sus planes de futuro, responde por si misma al intento de frenar el abuso del bolsillo de los parleños con los radares que ahora sí resultan muy molestos para todos.
Recent Comments