Los radares de velocidad son una de las principales preocupaciones de todo conductor cuando se encuentra en la carretera. El hecho de pisar más de la cuenta el acelerador en determinados tramos puede ser motivo de multas y de más de una irritación para un conductor que pierde los papeles.
Controlar esos nervios y furia es primordial para que la infracción no cuente con agravante y no se tenga más motivos para poner en contra a los agentes de la autoridad. Sin embargo estas acciones esporádicas e incontrolables no siempre se pueden preveer ni del todo comprender. Un motivo y enfado que ha convertido en protagonista a un conductor por su particular reacción tras ser multado y asolado por el flash del radar. Éste ni corto ni perezoso tras recibir el fogonazo de luz, embistió cual miura al coche de la Guardia Civil lo que dio lugar a la intervención posterior de los servicios de emergencias.
A consecuencia del impacto tanto el conductor como el agente de la autoridad resultaron heridos y tuvieron que precisar de una ambulancia para su traslado a un centro sanitario donde permanecieron unas horas de vigilancia. Un incidente que no sólo ha causado cierto estupor entre los compañeros del agente herido en la carretera de Gondomar de Pontevedra, sino también de los propios vecinos de la zona que han ofrecido constantes muestras de solidaridad ante el agente herido en servicio.
La irritabilidad de los conductores ante los radares
Un incidente que no es del todo aislado y que es un claro reflejo también de la frecuencia en las carreteras de los radares móviles que tanto irritan a los conductores. Una presión que durante estos años va en aumento con el motivo principal de la seguridad, aunque también sean criticados como instrumento para recaudar. Esto hace un debate permanentemente activo y candente que de todas formas no debe terminar con la paciencia ni las formas de los conductores para no llegar a estos episodios tan poco razonables.
Ayer, 19 de Mayo de 2017, en la A-1 entre Lerma y Burgos, me cazó un radar de la DGT. El coche estaba camuflado en el espacio central entre los dos sentidos de la autovía y disparó una foto frontal, acompañado de un fogonazo considerable de flash, que me deslumbró.
Seguro que me llega la multa, pero me pregunto si no es peligroso el deslumbrar a un conductor que circula a cierta velocidad. Esto va acorde con lo que he leído más arriba. No puedo protestar?
Buenos días, José María:
Respecto a su consulta le recomendamos que, tan pronto como llegue la multa nos la remita con el fin de valorar el expediente. Habrá que estudiar las pruebas que se acompañen a la denuncia y ver si es necesario solicitar otras tales como la ratificación del agente, el certificado del cinemómetro que tomó la fotografía para presentar las alegaciones correspondientes y en su caso manifestar lo acontecido. Un saludo.