Holanda prohibe imponer multas de tráfico a diplomáticos

Un tribunal de Holanda con una prohibición del todo novedosa, ha sentado un precedente que puede hacer temblar los cimientos de la sociedad. El hecho de otorgar a los diplomáticos el privilegio de no tener que hacer frente a multas de tráfico, se posiciona como un tema de alto voltaje y discusión en el resto de esferas.

Se trata de una decisión que pone al Gobierno holandés entre las cuerdas, dado que este tribunal de Holanda ha prohibido al estado imponer a diplomáticos extranjeros multas de tráfico relativas a infracciones, tales como excesos de velocidad o el hecho de aparcar los coches sin acreditación o el ticket correspondiente. Una ventaja que a todas luces no ha sentado bien al resto de ciudadanos que no entienden ni ven con bueno ojos esta estratégia y ventaja diplomática.

El motivo que ha sentado esta base y que ha elevado a motivo de peso la prohibición, reside en que la imposición de multas de tráfico, por estas razones, viola la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas que establecen la inmunidad diplomática.

Castigo benévolo

En contraposición a esta nueva forma de operar, el Gobierno de Holanda ha tomado como iniciativa que los miembros del cuerpo diplomático que no pagan las multas, pierdan sus tarjetas de gasolina libre de impuestos, para mantenerles de alguna forma una variante de castigo. Un solución que de todas formas no sirve de compensación a los ciudadanos que elevan sus quejas ante estos privilegios.

¿Os imagináis que esto sucediera aquí?