Los hay precavidos que no necesitan de ningún impulso para parar cuando el semáforo está a punto de ponerse en rojo. Otros sin embargo se lanzan a la carrera como si se tratara de vida o muerte esos escasos segundos que les supondría esperar a que el semáforo vuelva al ansiado verde. El caso es que para conseguir que todo el mundo respete por igual la señalización vial, Donostia (Guipúzcoa) se ha armado en concreto con dos dispositivos detectores que están manteniendo a raya a esos conductores acelerados.
Estos aparatos, conocidos como ‘foto-rojos’, que se han situado estratégicamente en dos calles en las que por sistema se saltaban sus semáforos – calle de José Elosegi y Zumalakarregi- han hecho sus deberes desde que fueran instalados el pasado 15 de marzo. Y el resultado traducido en cifras muestra cómo han conseguido reducir en un 76% el número de infracciones por saltarse dichos semáforos en rojo.
Estos detectores fichan como si se tratase de una fotografía las matrículas y el color de los coches que no cumplen con la obligación de detenerse frente al disco rojo, además de la hora en la que se produce la infracción. Un gasto importante para el Ayuntamiento del municipio que ha conseguido en estos meses ciertos ingresos para las arcas por la acumulación de multas a los conductores, consiguiendo hacer más seguros unos puntos especialmente delicados para los peatones.
Cómo librarse de las multas en zonas APR
Recent Comments